Gracia María Buccella, "Miss Italia 1959", viene a rodar una película en España, "La fontana de Trevi", coproducción hispano-italiana. Ella es alta, rubia, cabellos largos, ojos claros, jersey y falda estrechos. Impresionante por los cuatro costados, causó sensación en el hotel.
- Vengo de Hollywood, del Concurso Miss Universo en que quedé tercera y he hecho telefilms.
- ¿Cabía enterita en la pantalla?
- Sólo la mitad; tengo 19 años, vea mi pasaporte (N. 6-8-1940).
- ¿En tan poco tiempo ha dado tanto de sí? ¿Sus medidas?
- Altura 1m.70cm., peso 58 kg. busto 101 cm., cintura 56 cm., caderas 93 cm., calzo un 37.
- ¿Es usted capaz - propongo de repente - de dar una vuelta por la plaza de Cataluña, sola?
- ¡Voy! - se decide.
- Sale del hotel y como una palmera cimbreante cruza la calzada de la avenida José Antonio, sin respetar el semáforo en rojo ni escuchar el pito del guardia urbano y se va hasta la plaza de Cataluña, parando auténticamente la circulación. Regresa al hotel con el pulso inalterado...
COSECHA PROPIA: Deduzco, Manuel, que a tí sí que se te alteró el pulso, como también, seguro, al recepcionista Carlos Rojas del hotel Avenida Palace, puesto que a los cincuenta años del suceso todavía lo comenta a la periodista Ima Sanchis de tu periódico, La Vanguardia.
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